Más de una decena de entidades y 60 personas acudieron el pasado 12 de julio a la I Jornada de Huertas Abiertas en el distrito de Villaverde, impulsada por el Mar de Alimentación en colaboración con otras entidades, como la Fundación Afandice. Una mañana que sirvió para trabajar y ahondar en un plan distrital para hacer las huertas más inclusivas y accesibles a todas las capacidades, a través de la metodología de las Comunidades de Aprendizaje (CAP).

Las más de 60 personas con diferentes capacidades que participaron fueron divididas en cuatro grupos de colores y trabajaron en huertas adaptadas, por un lado, y en cosechas no accesibles, por otro. Tras cerca de una hora de trabajo y de experimentar ambos escenarios, las dinamizadoras reunieron a todo el grupo para recoger sus experiencias: ¿Qué has encontrado difícil? ¿Qué cambiarías en esta huerta?

Las diferencias entre un huerto y otro tienen mucho que ver con el espacio físico: unas hortalizas están sembradas en la tierra a la altura del suelo; otras, sobre unos bancales lo suficientemente altos como para no tener que agacharse y para que, sobre todo, las personas que usan silla de ruedas, puedan alcanzar a coger, por ejemplo, los tomates. Pero las diferencias no sólo son físicas. Durante esta práctica metodológica, basada en la experiencia de vivir una escena u otra, también se trabajó lo sensorial a través de la empatía.

 

En este sentido, las dinamizadoras taparon los ojos a algunas participantes, o les pusieron cascos para impedirles escuchar, de forma que fueron conscientes de cómo se vive la huerta sin las virtudes de todos los sentidos trabajando a la vez. Esto sirvió también para que el resto reflexionara sobre cómo se podría ayudar a alguien con otras capacidades diferentes a las nuestras a la hora de trabajar la tierra.

Por último, para finalizar la jornada, se organizaó una cata de tomates de la huerta: tomate pera, rosado, kumato y tigre. De esta forma, se trabajó otro de los estímulos sensoriales para aprender a diferenciar los distintos sabores de la hortaliza del verano más famosa.

¿Por qué huertas inclusivas?

Una de las líneas estratégicas del Mar de Alimentación es acercar la huerta al distrito de Villaverde, con el objetivo de comenzar a cambiar hábitos alimenticios y generar dinámicas de consumo consciente. Para eso, este Mar puso en marcha la campaña #AlimentaVillaverde, de la huerta al plato. En el marco de esta iniciativa, se ha trabajado también con la Comunidad de Aprendizaje de Huertas Inclusivas, cuyo objetivo es eliminar las barreras de todo tipo para que estos espacios sean participados por todas las personas, independientemente de sus capacidades.

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