Poner la vida y las necesidades de las personas en el centro de nuestros objetivos empresariales debe ser algo más que una bonita frase o declaración de intenciones. Es una premisa que tiene que atravesar nuestro proyecto económico en todas sus dimensiones y ello implica de manera directa a las personas socias y trabajadoras. Se trata de buscar el equilibrio entre la competitividad económica, la sostenibilidad social y el desarrollo personal, algo complicado pero factible y que sin duda es garante de proyectos económicos más sólidos y con una larga trayectoria. Aquí puedes encontrar algunas claves para poner en marcha los principios de la economía social y solidaria en tu empresa.

OBJETIVO 1:
CONSTRUIR UNA ORGANIZACIÓN DEMOCRÁTICA

PARTICIPACIÓN

Es necesario que revises todos los acuerdos y protocolos, y que los actualices cada cierto tiempo. Además, es fundamental que promuevas espacios de participación y de toma de decisiones que sean transparentes, formales, funcionales y horizontales, como son los plenarios o asambleas.

REPARTO DE PODER

Fomentar las relaciones de equidad dentro de tu empresa es imprescindible para adscribirse a la economía social y solidaria. En este sentido, preguntarse cuántas personas toman las decisiones, y cuántas de ellas son mujeres, resulta de vital importancia. Además, es preciso rotar de forma equitativa las diferentes tareas y responsabilidades dentro de la organización, como las labores públicas de representación o las labores de cuidados, más invisibles. Las entidades de economía social y solidaria también tienen en cuenta el uso del lenguaje no sexista, la igualdad salarial y la habilitación de espacios para resolver conflictos.

TRANSPARENCIA INTERNA

Para promover la transparencia dentro de las empresas, hay que preguntarse cuántos trabajadores y trabajadoras conocen la situación económica de la entidad, e intentar que los salarios y remuneraciones sean públicas. También debes cerciorarte de que las personas trabajadoras conocen el funcionamiento interno y protocolos o acuerdos de la empresa. En esta línea, es importante formalizar el trabajo y las decisiones, así como preparar y organizar las reuniones con orden del día y toma de actas.

OBJETIVO 2:
PROMOVER EL BIENESTAR LABORAL EN TODAS SUS DIMENSIONES

FORMACIÓN

Impulsar planes de formación financiados por la empresa para el personal e imputar esas horas dentro de la jornada laboral es una buena práctica que convertirá tu entidad en una organización que cuida.

EQUIDAD Y DIVERSIDAD

Otra práctica imprescindible es fomentar la diversidad de capacidades y poner en marcha acciones inclusivas, como diferentes tipos de contrataciones.

CONDICIONES LABORALES

Es fundamental estudiar si en tu empresa existe brecha salarial y clarificar cómo contabilizar las horas extras. Si quieres cuidar, también resulta muy positivo analizar las opciones de teletrabajo, así como las jornadas flexibles y evaluar cómo se abordan los, tan habituales, picos de trabajo.

CORRESPONSABILIDAD LABORAL

A) CUIDADO A PERSONAS DEPENDIENTES

Sobre la maternidad, debes preguntarte si puedes ampliar las horas de lactancia y el tiempo de baja por maternidad, más allá de lo que dicta la ley, además de reducir la jornada durante el embarazo. También es preciso describir el tipo de excedencias que existen y las medidas para mejorar la conciliación.

B) CUIDADO ENTRE TRABAJADORAS Y TRABAJADORES

Para fomentar los cuidados dentro de la empresa, es necesario que sepas identificar los malestares internos y generar espacios de encuentro regulares y distendidos donde se comparta la información. Asimismo, resulta muy útil contar con algún tipo de formación al respecto y recurrir a ayuda profesional, como la mediación/ facilitación para solucionar determinados nudos.

Contenido publicado originalmente en la revista número 3 de MARES. ¡Descárgala!